Releamos de nuevo la teoría de la felicidad:

"A cualquier instante o periodo de alegría y felicidad le sigue uno de tristeza y amargura. Y al revés. La proporción no es idéntica entre alegría/tristeza. Es decir, un momento inmensamente feliz no tiene porque tener respuesta en un momento inmensamente triste. Ni al revés. No obstante las proporciones, con el permiso del 'destino', se suelen respetar.
En la vida el nacimiento es el momento más inmensamente feliz. En la vida la muerte es el momento más inmensamente triste."
No se trata de ninguna revelación sobre la felicidad. En realidad, el significado, el sentido de la teoría se desprende después de analizar el texto minuciosamente.

De alguna forma, si reflexionamos y pensamos en la teoría, concluiremos que únicamente están diciendo obviedades.
Así es. La teoría se basa en definir la felicidad como algo obvio y sencillo. Somos nosotros que complicamos y adornamos su significado. Somos nosotros que, de esta manera, nos alejamos de su definición más real. Y al mismo tiempo somos nosotros los que dificultamos su acceso, mitificando el conseguirla o estar a años luz de llegar a ella.

Sencillamente es así.

¿Podemos imaginar una vida plenamente feliz?
No, en absoluto. El mero hecho que se acabe es ya algo que le quita el advervio "plenamente". Es decir, supongamos que somos inmensamente felices durante toda nuestra existencia. Seriamos plenamente felices si fueramos eternamente felices. Dado que no es así, el momento antes en que expira nuestra vida es un momento de terrible tristeza, de gran dolor.

¿Podemos imaginar una vida plenamente triste?
Tampoco. No es posible. Aunque todos podamos tener en la cabeza existencias muy afligidas, vidas con muchos, grandes y continuados problemas, siempre hay varios momentos de felicidad. Como mínimo, en el nacimiento, para la persona en si misma, el mero hecho de pasar a existir es un instante feliz.

¿Podemos imaginar una vida que se mueve en todo momento entre la alegría y la tristeza?
Por supuesto: la nuestra. La de todo el mundo.

Así pues, acceder a la felicidad es formar parte de "un juego malabar de alegrías y tristezas, de júbilo y dolor, de risas y lloros" en el que queremos optimizar la balanza en el lado de los periodos o momentos de alegría. Todo ello modulado, o distorsionado si se quiere, por los caprichos del destino, tierno amante de la suerte.

En base a la teoría podemos definir además algunos hechos, por lo menos, curiosos:
  • La felicidad no es justa ni injusta está distorsionada por el azar.
  • Aquel que busca únicamente momentos de felicidad difícilmente llegará a ser feliz.
  • Aquel que busca únicamente momentos de tristeza tampoco llegará a ser feliz.
  • Aquel que no busca la felicidad muy probablemente será más feliz que el que la persiga desmesuradamente.
  • La felicidad no es lógica ni ilógica está "salpicada" por el caos.
Alguien una vez escribió que"... la felicidad es como salir al campo a cazar mariposas. Si vas detrás de ellas intentando cazarlas acabarás derrotado y posiblemente con muy poco éxito. No obstante, si te sientas, tranquilamente, a reposar y esperas pacientemente, quizás acabe posándose alguna encima de ti..."

En el resto de la información que ponemos a tu disposición completaremos los datos que tenemos sobre esta teoría, que también tiene unos claros postulados definiendo una "forma de vida en pro de la felicidad". Sinceramente no perseguimos tal extremo; lo único que queremos es que sepas y decidas, uses, opines, compartas,....

Decirte además que en base la opinión que nos puedas dar, iremos ampliando y robusteciendo la teoría, incorporando todos los conceptos que hayais creido sean importantes.
Para ello, podeis dejar vuestra opinión accediendo a nuestro foro...

 
 
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